Hace un par de meses vengo
armando una nota que recuente los casos mediatizados de FEMICIDIOS en las
provincias de Chaco y Corrientes, recaudando archivos virtuales.
El primer dato casi
cuantitativo que distinguí es que los diarios chaqueños hacían un mayor uso de
la palabra ‘femicidio”, mientras que en Corrientes aún se utilizaban eufemismos
encubridores como “pelea de pareja”, “crimen pasional”, “marido mata a su
mujer porque…”, entre otros.
Analizando estos puntos,
sentí necesario hacer un stop para tratar un tema más reciente condensado en
tres “noticias mediáticas”: La denuncia de secuestro de una joven chaqueña en
el centro de Corrientes, la muerte de una joven penitenciaria en horas de
trabajo y la muestra pública de fotos “privadas” de otro grupo de
penitenciarias en la provincia de Chaco.
¿Qué arrojan estas tres
noticias sobre el concepto Mujer en el mundo posible mediático-virtual? Víctima
– Vulnerabilidad – Juicio/Moral – Público/Privado.
El juego de estas palabras
es lo que se esconderá como metamensaje en cada noticia y se hará aún más
visible en la cadena de significantes que multiplicaran lxs lectorxs en sus
comentarios a través de las redes sociales y portales de noticias.
La cronología de la noticia
sobre la joven que denunció un intento de secuestro comienza con titulares
envolventes de alarma y precaución. Si bien hay que rescatar que en la mayoría
de los medios se respetó el uso de potenciales hasta confirmar los hechos en
titulares, la crónica en el cuerpo de la noticia reforzaba el relato de alarma
y miedo, con el uso de adjetivos como “escapó milagrosamente”, “brutal
secuestro”, “no corrió con la misma suerte” , “aberrante suceso”. Adjetivaciones
que bajo la reprimenda moral del hecho esconden también la idea de
debilidad y azar que rodea la vida de una mujer joven en la vía pública.
De este modo, se nos
advierte como mujeres de los peligros de circular solas, de la desprotección generalizada
que no termina tampoco al recurrir a las autoridades oficiales (para este
ejemplo ver el ENLACE ANEXO del diario Norte sobre declaraciones del
padre de la joven). Un cierto disciplinamiento de los cuerpos a través del
mismo discurso.
Y como esta nota también
trata de la función de la y el comunicadora/or en este tipo de noticias, pondré
como ejemplo sólo dos comentarios de comunicadores sociales sobre el hecho una
vez desmentido oficialmente el secuestro:
Comentarios en redes sociales |
“ESTABA POR LA CALLE SAN LORENZO
....CAPAZ FUE A TIA DORIS Y LE DIERON.....MASITA”, haciendo alusión al video difundido dónde se ve
a la joven salir de un motel ubicado por esa calle. Reconocido comunicador y
relacionista público correntino.
¿Qué nos dice estos
comentarios más que implícita ya explícitamente? En el primero, más grave aún
que las adjetivaciones despectivas y conocidas en torno a la joven, lo
interesante es cómo una noticia en particular sirve para encubrir
(¿justificar?) el desconocimiento, la desigualdad y desinterés que caracteriza
al tratamiento policial en dicha problemática.
Cabe resaltar que la
falsedad o no del hecho denunciado no debe influir en el buen procedimiento
policíaco, que debe tomar de modo correcto la denuncia y seguir los protocolos
judiciales en forma inmediata.
Hay una sobre-estimación moral de la
mentira. El hecho de haber mentido
la transforma en persona juzgada y juzgable, en una delincuente de esa verdad
reservada a los vigilantes de la Moral y las Buenas Costumbres para la Mujer
(que generalmente aparece en las redacciones como una tercera persona
omnisciente).
No hay cabida en este debate devenido en juicio y apedreamiento en la plaza pública, que
muchas veces las mujeres (sobre todo las más jóvenes) mienten sobre su vida sexual, porque su vida sexual sigue siendo una
cuestión social y de Estado (y por lo tanto juzgable).
Más
allá de que todo este texto sea un análisis subjetivo de quien escribe, me tomo un
espacio para asentar una opinión personal: no me cabe duda que una noticia
“desmentida” como ésta es muy conveniente para que el Gobierno y la Policía
provincial pueda soslayar su absoluta incompetencia y desinterés por el tema de
la trata de personas en Corrientes (Para ampliación del tema ver ENLACES ANEXOS
RECOMENDADOS). O acaso las autoridades competentes se han tomado el tiempo de armar una conferencia de prensa para explicar los múltiples allanamientos a prostíbulos y desbaratamiento de redes de trata en el interior de Corrientes.
El
segundo comentario tan sólo refuerza la desestimación de los temas macro que
rodean al hecho particular a través del chiste y la burla. Pero aquí entran en
juego la superficialidad y los puentes forzados que se entrelazan
discursivamente entre temas bien distintos: la vida sexual de una joven /
estimación general de su persona / una presunta denuncia de secuestro en una
provincia reconocida como lugar de tránsito y captación de Trata de Personas (ver ENLACE RECOMENDADO de edicionea.com).
Y
esto abre el segundo debate sobre las dos noticias restantes. Cómo llegaron los
medios de difusión a establecer una conexión entre el asesinato de una mujer
penitenciaria en manos de un recluso y unas fotos cuasi nudistas que
trascendieron (¿casualmente?) unos días después de otro grupo de penitenciarias
también del Chaco.
Esta
conexión queda vivamente ejemplificada en este párrafo de una nota del diario
Clarín titulada ‘Escándalo por fotos hot de penitenciarias’: “Lo curioso es que
las fotos salieron a la luz a pocos días de que César de la Concepción, un
recluso acusado de homicidio, asesinó a la penitenciaria Yamile Gómez y luego
apareciera muerto en su celda, en lo que se informó como un supuesto suicidio”.
De
este modo, queda asentado la jerarquización periodística y el tan nombrado factor de
noticiabilidad en nuestra profesión: en un primer plano el “desacato e irresponsabilidad” de estas penitenciarias” y sólo por comparación se pierde, en un segundo plano, el crimen de una trabajadora que ronda la carátula de un
femicidio social y estatal.
Nota
aparte merecerían dos cuestiones referidas a la fotografía: el uso
indiscriminado de la imagen de la joven que denunció el secuestro –tanto el
video del motel como fotos personales- y el juicio de valor abierto sobre ciertas partes (erotizantes) del cuerpo de las mujeres puestas al
descubierto. Qué sesgo de cierta moral mojigata y censuradora se ve
“escandalizada” por la exposición de estas “mujeres comunes”, mientras consume
sin cuestionamientos el estereotipo mediático del cuerpo femenino desnudo
hiperexpuesto de modo comercial.
SOBRE PERIODISMO,
RESPONSABILIDAD Y COMPAÑERISMO
Cuando ingresamos a la Facultad de Periodismo lo primero que la educación bancaria nos enseña más con
gestos y sugerencias que con teoría es que al salir al campo laboral de los
medios de comunicación seremos lacayos de los grandes empresarios perversos y
sedientos de poder y dinero. La autocensura, la mecanización de la escritura y
la frustración serán moneda corriente siempre y cuando queramos cobrar algún
salario fijo por nuestro trabajo.
¡Buenas noticias señoras y
señoros! Todo eso es verdad. Sin embargo, lo que no hay que perder de vista es
que, como dice la canción, "no todo es blanco o negro, es gris, todo depende del matiz".
En esta hermosa escala de
grises y de colores que es nuestra profesión, existen otros modos de paliar
exigencias del jefe/a de sección, línea editorial del medio, dueño de la
empresa con ideas arcaicas y amarillistas, ambiente laboral hostil, escasez de
recursos, escasez de tiempo, explotación laboral, cansancio, entre tantos otros
factores sociales, individuales e incluso emocionales (a recordar que como
periodistas también estamos creando, quehacer no menor y desgastante).
Algún intersticio, un punto
de fuga sin que ese ojo juzgador de la redacción mediática se dé cuenta. Después
de todo, quien empuña la pluma siempre vamos a ser nosotrxs. Con un simple cambio, se
hace la diferencia.
Un título que no demarque
juicio de valor negativo hacia la persona que hasta ese momento es
protagonista/víctima de un hecho violento, el uso de potenciales, hacer un
recuento de casos anteriores o de lo que se dijo hasta el momento, diversificar
las fuentes (así estas sean de archivo virtual, es lo que tenemos más a manos
cuando el tiempo nos gana), agregar un párrafo más dónde sí pueda subjetivarse
casos tan serios, que haga un anclaje sobre el problema macro.
Un ejemplo claro sería en
la desaparición o presunto secuestro de una adolescente. Por más que estemos
obligados a copiar y pegar la siempre mal redactada gacetilla policial, y no
tengamos más datos que esos; una posible sugerencia sería agregar un breve
párrafo con algún comentario sobre el secuestro de personas, y su condición en
la región, o de teléfonos e información útiles para sospechas de esos casos.
Otro vicio, a veces más
crítico y productivo, pero que también generan rivalidades y odios absurdos,
son los REPUDIOS y LAMENTOS hacia la redacción de otros colegas. Más
interesante sería aclarar que no todas las formas de presentar las noticias son
como esas, marcar lo positivo, colaborar en red, si bien no entre dueños de
medios, si entre compañerxs profesionales. Quizás sugerir, corregir en tono
amigable. Hay que recordar que en todo discurso no sólo comunica lo que se
dice, sino cómo se lo dice. Y eso todo/a comunicador/a lo sabe.
ENLACES RECOMENDADOS
-Nota publicada por la
delegada de la Red Provincial
contra la Violencia Machista Corrientes, Carolina González: https://www.facebook.com/notes/caro-gonzalez/la-trata-de-mujeres-existe-en-corrientes/10152242699616352
ENLACES DE LAS NOTICIAS
ANALIZADAS:
EJEMPLOS DE NOTICIAS CON UN
TRATAMIENTO CORRECTO